Mal comienzo para las fichas de juego en 2025

Sacudido por el lanzamiento de DeepSeek, un aspecto positivo fue que el impacto en el mercado cripto no fue tan grave como podría haber sido.

BTC cayó un 5 %, ETH un 7 % y SOL un 10 %, aunque desde entonces se han recuperado. Los memecoins fueron los más afectados; por ejemplo, PENGU cayó un 21 %, ya que a menudo son la primera fuente de liquidez de salida.

Sin embargo, incluso sin la entrada al mercado del competidor chino de OpenAI, ha sido evidente desde hace un tiempo que el sentimiento en torno a los tokens de gaming sigue siendo muy débil.

Todos los principales tokens de gaming han caído en precio en lo que va de 2025, con MOCA y BEAM bajando hasta un 40 % en los primeros 27 días del año, y GMT, SUPER, BIGTIME y YGG no muy lejos de esa cifra.

Si miramos más atrás, la situación no es mucho mejor, ya que solo MOCA y SUPER han visto aumentar su precio desde el 1 de enero de 2024.

De hecho, muchos tokens han visto caer su precio hasta un 75% en este periodo:

• WEMIX (Wemade)
• ENJ (Enjin)
• GMT (Stepn)
• ILV (Illuvium)
• BIGTIME (Big Time)
• XAI (Xai)
• SAGA (Saga)
• MAGIC (TreasureDAO)
• PIXEL (Pixels)

En muchos casos, este rendimiento será irrecuperable, pero, a pesar de ofrecer una perspectiva desalentadora, el precio de los tokens de juego no es el único factor a considerar al medir el sentimiento en los juegos basados en blockchain.

Mirando en otra dirección, muchos desarrolladores han demostrado ser resilientes ante condiciones difíciles, como gran parte de 2023 y 2024.

Un ejemplo destacado es Pixels, que sigue siendo uno de los principales referentes, ya que ha identificado el problema central de la mayoría de las economías play-to-earn y está decidido a diseñar un modelo sostenible que funcione.

Por supuesto, también hay muchos juegos blockchain que aún no tienen un token o que no dependen directamente del rendimiento de uno, como NFL Rivals, Off The Grid, Champions Tactics y los próximos EVE Frontier y Craft World, por mencionar algunos.

Sin embargo, cualquier proyecto que planee lanzar un token en la primera mitad de 2025 seguramente estará nervioso.